¡Hola! Soy
Nubia Carolina Rodríguez
A lo largo de mi vida me he sumergido en un proceso de exploración constante. Desde mi adolescencia, sentí una profunda curiosidad por el alma humana, lo que me llevó al camino del autoconocimiento.
He navegado la alta presión del mundo corporativo, superado el síndrome de burnout, la ansiedad y logré reconstruir mi vida tras pérdidas profundas. Estas vivencias no me definieron, sino que me dieron una profunda empatía y una perspectiva única sobre la resiliencia humana.
Mi propia evolución me enseñó que: La verdadera transformación reside en construir el futuro.
No fue por accidente
Mi camino de Sanación y Crecimiento
Vengo de una familia profundamente religiosa, así que la conexión con lo trascendente siempre fue parte de mi vida. Desde muy niña, tuve una conexión especial con lo espiritual, pero en mi juventud, la consideré algo separado de mi camino profesional. Mientras avanzaba en mis estudios universitarios y construía una carrera en el mundo corporativo, comencé a aprender diversas técnicas holísticas. No las buscaba activamente; simplemente llegaban a mí. Las utilizaba para mi crecimiento personal, creyendo que lo «serio» y «profesional» era opuesto a lo espiritual.
Mi vida profesional era la envidia de muchos: dos carreras, dos maestrías y una extensa trayectoria trabajando con directivos de talla mundial. Desde muy joven construí una imagen de éxito inquebrantable; lideraba equipos, mi agenda estaba llena, mi salario era alto y mi valor personal parecía estar directamente ligado a mi productividad. Sin embargo, detrás de esa fachada, había un profundo vacío. El estrés crónico me llevó a un síndrome de burnout lo que me ahorillaba a darme cuenta de que estaba muerta en vida.
Fue en mi momento más oscuro. Un período de siete años marcado por pérdidas devastadoras, como el fallecimiento de mis padres y de mi hermano, un estrés abrumador y un profundo sentimiento de vacío. Fue en ese momento de dolor que mi alma me susurró: «No quiero morir sin haber vivido». Ahí fue cuando me apoyé en las metodologías alternativas que antes consideraba secundarias.
Los retiros espirituales, las medicinas ancestrales y las técnicas cuánticas se convirtieron en mi salvavidas. No solo me ayudaron a superar las heridas y a transitar las experiencias difíciles, sino que me llevaron a una revelación. Comprendí que no tenía que elegir entre la ciencia y la espiritualidad, entre lo serio y lo etérico. Me di cuenta de que podía ser un todo. No tenía que renunciar al llamado de mi alma por miedo a ser juzgada de rara.
Pude ver con claridad que mi podía integrar lo mejor de ambos mundos: la psicología tradicional y la espiritualidad. Así nació mi camino, uniendo la solidez de la ciencia con la sabiduría de lo transpersonal, para guiar a otros a encontrar el mismo sentido de plenitud que yo descubrí.
En mi transformación
Reconecté con mi esencia
Los cambios que experimenté no fueron solo a nivel externo, sino que fueron profundos y se manifestaron en cada área de mi vida:
- Bajé 28 libras en 7 meses.
- La adicción al trabajo se desvaneció.
- Terminó la búsqueda de validación externa.
- Pasé de un estado de estrés y burnout a una paz duradera.
Dejé de esconder mi verdadero yo por miedo a ser juzgada y hoy hablo libremente de espiritualidad. Cambié el enfoque en la productividad y los resultados por el equilibrio y el bienestar.
Hoy, mi propósito no es ser productiva.
Mi propósito es vivir en plenitud y ayudar a otras mujeres a encontrar su propio camino, a que se atrevan a escuchar su voz interior para que puedan transformar su dolor en una fuente de sanación y de crecimiento.
Mi objetivo es que no camines sola…
A lo largo de mi carrera, he conocido a miles de mujeres entre los 35 y 55 años, que parecen tenerlo todo: salud, éxito, una buena situación económica y relaciones saludables. Sin embargo, detrás de esa fachada, a menudo sentían un gran vacío. Tenían la necesidad de ser comprendidas y noté que, a pesar de sus logros, muchas buscaban una conexión más profunda con ellas mismas y un propósito que fuera más allá de lo que la sociedad les decía que debían tener.
En especial mujeres después de los 40, que atraviesan la etapa de la perimenopausia; un momento de grandes desafíos internos y externos. A menudo se le da un enfoque únicamente biológico o ginecológico, pero es mucho más que eso. Es un período de profunda transformación que viene acompañado de una gran exigencia profesional y personal.
Hace parte de mi propósito el acompañarte en este proceso de autonocimiento para que puedas reinventar tu vida. Que puedas encontrar un nuevo sentido y tu propósito con las respuestas que ya existen dentro de ti misma.
Algunos de los talleres que he dirigido
Algunas de mis certificaciones
El respaldo de mi Acompañamiento









¿Te reconoces en mi historia?
Si sientes que ha llegado tu momento, si buscas algo más profundo, te invito a que conversemos y demos juntas el primer paso hacia tu transformación.